El 27 de junio de 2008, el gobierno emitió casi 100 decretos legislativos en el marco de las facultades que el Congreso le confirió para supuestamente adecuar nuestra legislación con el Tratado de Libre Comercio con los Estados Unidos. Una de estas controvertidas normas fue el D.L. 1089 que establece el Régimen Temporal Extraordinario de Formalización y Titulación de Predios Rurales, la verdadera madre del cordero de las corruptelas descubiertas últimamente en Cofopri (Organismo de Formalización de la Propiedad Informal).
Así como en Chilca, son decenas las denuncias en provincias y regiones que llenarían varias páginas de este diario. Por ejemplo, casi en paralelo con el trámite que inició Oswaldo Chauca para titular a su favor los terrenos de Chilca (ampliamente divulgados en los medios de comunicación), Yulino Fulgencio Milla, ex director regional de Educación de Lima Provincias obtuvo del Cofopri la propiedad de un terreno de 30 hectáreas a tan sólo 4,764.60 nuevos soles en el sector Ensenada, distrito de Pativilca, provincia de Barranca, Lima. Es decir el Estado le entregó el terreno, vía Cofopri, a menos de 0.016 céntimos de nuevo sol el metro cuadrado.
En el caso de Barranca, Yulino Milla ha sido también director de la UGEL 03 de Lima entre mayo de 2005 y enero 2006, así como candidato a congresista en las elecciones generales de 2006, por el movimiento “Con Fuerza Perú”, en la que candidateó para la segunda vicepresidencia de la República la fujimorista María Jesús Espinoza.
El Decreto Legislativo 1089, firmado por el presidente Alan García y el entonces premier, Jorge del Castillo, y su reglamento, el Decreto Supremo 032-2008-VIVIENDA suscrito también por el mandatario y la ministra del sector (en ese momento), Nidia Vílchez, posibilitan la valoración de los terrenos a precios de arancel para las formalizaciones que realice Cofopri, afectando los intereses del Estado. Contrariamente, la Ley 29151 del Sistema Nacional de Bienes Nacionales, de diciembre de 2007, exige la valorización a precio comercial, lo cual no es tomado en cuenta por Cofopri, como hemos visto tanto en el caso de Chilca y en el de Barranca.
Y, aunque la ley exige como condición previa a la formalización una inspección ocular, este trámite es cotidianamente soslayado, porque de lo contrario hubieran notado el montaje realizado en los terrenos de Chilca, tal como finalmente anotó el 23 de abril de este año en su informe N° 180-2010-COFOPRI/DFINT, el director de Formalización de Cofopri, Gonzalo Blanco, luego de una inspección de campo, que concluye “se ha podido determinar que el predio no se encuentra habilitado ni incorporado a la actividad agropecuaria”, lo cual es una flagrante infracción a la ley.
Apristización
Para la aplicación del D.L. 1089 y su reglamento, el gobierno nombró a Omar Quesada y éste a su vez designó jefes zonales del Cofopri a militantes y dirigentes del Partido Aprista (PAP). Así, desde el 2008 Quesada ha nombrado mediante sendas resoluciones directorales a algunos secretarios generales del PAP que tienen aspiraciones de candidatear a los gobiernos regionales o a los municipios provinciales o distritales.
Henry Grados es el jefe zonal de Cofopri en Piura, y es secretario general del PAP en su región. En declaraciones a la prensa piurana ha revelado que es militante aprista desde 1984. En el diario regional de la cadena “Correo” apareció publicado que Grados viajó del 5 al 8 de marzo a Lima, utilizando fondos del Cofopri, y aprovechó para participar en el XXIII congreso de su partido y, por supuesto, apoyar a su jefe en la entidad estatal, Omar Quesada, para que sea elegido secretario general del PAP.
La publicación regional sostuvo haber accedido el memorándum Nº 102-2010-Cofopri/OZPIU por el que Grados solicita al director de la oficina de Administración de la mencionada entidad, la asignación de viáticos para los días del 5, 6, 7 y 8 de marzo, “para realizar trámites en la Dirección Ejecutiva sobre implementación de recursos humanos” y para “coordinar con la directora de la oficina de coordinación descentralizada y con el coordinador del PCDPI”.
En Ica, el pasado 30 de abril, fue denunciado el secretario regional del APRA, Eddy García, quien también es jefe zonal de Cofopri en esa región, por la irregular entrega al también aprista Francisco Jordán más de 14 mil hectáreas de terreno que colindan con la Reserva Natural de Paracas y hay la sospecha que dos mil de las hectáreas concedidas a Jordán pertenecen al área protegida, que es intangible.
La Segunda Fiscalía Provincial de Ica, a cargo de Oswaldo Ramírez, abrió investigación preliminar a Eddy García y al asesor legal de Cofopri-Ica, Ignacio Inca, por los delitos de corrupción de funcionarios, colusión ilegal y abuso de autoridad.
García ha rechazado la denuncia porque, según alega, “no hubo ninguna adjudicación de terrenos en Paracas, porque no se ha levantado topografía, titulación ni formalización” pues “se trata de una propiedad privada y allí Cofopri no tiene injerencia”.
En la región La Libertad, el ahora ex jefe zonal de Cofopri Martín Sifuentes, también es investigado por las irregularidades presentadas en la transferencia de un terreno a la Asociación de Pequeños Industriales y Artesanos de Trujillo, el mismo que el gobierno regional reclama que es de su propiedad. Sifuentes tiene aspiraciones de postular al gobierno regional liberteño como candidato del partido de gobierno, cargo que actualmente está en manos de su correligionario, José Murgia.
A la ceremonia de entrega de títulos a esos empresarios trujillanos, asistió el mismo Omar Quesada y el presidente Alan García saludó la medida mediante una llamada telefónica.
Murgia no solo ha cuestionado la adjudicación y reclama el terreno del gobierno regional, sino que también ha pedido la revisión de “la ley que faculta a Cofopri venderlo (el terreno) a precio arancelario, cuando siempre se hace por un valor comercial”.
Algo anda mal
En Puno también se cuecen habas en los locales de Cofopri. Cuando Javier Bernal, ahora pre candidato en el PAP para el gobierno regional, era jefe zonal de Cofopri, fue denunciado por el diario Los Andes por cobrar el “diezmo” a los trabajadores a su cargo para su agrupación política. Esto ocurrió en enero del 2008, mientras que en 2006, a raíz de un accidente de tránsito, en el que murió el militante aprista Richard Colque, se descubrió el uso ilegal de bienes de Cofopri a favor de Bernal, entonces candidato del PAP a la presidencia de la región Puno. En esa oportunidad, por ayudar a encubrir este delito, el congresista PAP Tomás Cenzano fue sancionado con 30 días de suspensión en el Parlamento.
En Cusco, a principios de este mes, renunció Sandro Villanueva a la jefatura del Cofopri en esa región, no solo porque quiere ser candidato a la presidencia del gobierno regional, sino porque fue acusado de entregar de manera irregular 95 hectáreas en el distrito de Camanti, provincia de Quispicanchis, a personas que, según el secretario general del Frente de Defensa de Camanti, Jorge Rodríguez, no viven en esa localidad ni desarrollan actividades agropecuarias.
Desde el Partido Aprista y las organizaciones sociales piden una investigación a Villanueva por aprovecharse de su cargo en Cofopri, para su carrera política. Villanueva postuló en 2006 al Congreso.
También han sido jefes zonales de Cofopri, Adler Calle, quien fue candidato a alcalde en Ayacucho; Jorge Arroyo, secretario regional aprista, en Cajamarca; Felícitas Román, aprista cercana del ex presidente regional Daniel Vera, en cuya gestión ella se desempeñó como secretaria general del Gobierno Regional de Arequipa.
También el secretario regional del PAP en Tacna, Enrique Melgar, es jefe zonal de Cofopri. Melgar es precandidato a la presidencia regional de la ciudad heroica. Luego de la renuncia de Quesada al principal cargo de Cofopri, Melgar dimitió para habilitarse para candidatear. Además son militantes y han sido dirigentes apristas, Antonio Valverde y Fortunato Silva, jefes zonales de Apurímac y Moquegua.
Omar Quesada siempre ha negado que haya copamiento de militantes apristas en Cofopri, pero estas pruebas lo desmienten.
Susana Grados Díaz
Redacción
FUENTE: LA PRIMERA
